GESTIÓN DEL GALLINERO PARA PRODUCCIÓN DE ABONO

 

GALLINERO COMO ZONA DE PRODUCCIÓN DE ABONO

La gallinaza, el estiércol de las aves en general, es muy corrosivo. Por lo tanto, su proceso de compostaje es un poco distinto al de otros estiércoles.

La gallinaza es uno de los estiércoles más completos que existen. Sobre todo por sus niveles de N-P-K-Ca. La alimentación de las gallinas influye directamente en la riqueza mineral de la gallinaza. A más variedad en la alimentación, más riqueza mineral. Importantísimo, siempre que se pueda, incluir en su alimentación restos vegetales en verde y restos hortícolas en general, siendo las hojas de coles y la ortiga dos de los alimentos más completos para asegurar la puesta de huevo junto con cereales y maíz partido. Las gallinas son omnívoras así que comen todo tipo de alimentos, TODO TIPO DE ALIMENTOS.

Si hay posibilidad de pastorearlas en un circuito de pastoreos rotativos para que se alimenten de pasto y pequeños organismos aún mejor. De esta manera podréis fertilizar las zonas de pastoreo al mismo tiempo que cubrirán una pequeña parte de su alimentación. Es una buena opción pastorearlas durante unos meses en zonas que hayáis pensado cultivar después. Siempre hay que dejar un margen mínimo de entre 3-4 meses para poder empezar a implantar cultivos en las zonas previamente pastoreadas.

Dicho esto, y presuponiendo una alimentación equilibrada de las gallinas, vamos a ver cómo poder conseguir que la gallinaza composte en el menor tiempo posible con el menor esfuerzo posible mediante las camas de la caseta del gallinero y la adición de abundante MO en el patio de tierra del gallinero.

Cubriendo con MO el patio del gallinero

1.      Dentro de la caseta del gallinero.

El suelo de la caseta donde duermen las gallinas debe estar SIEMPRE cubierto con un grosor de unos 5-10cms. Los materiales más interesantes son: paja, hierba seca, serrín y virutas de leña (familia Quercus), cascarilla de cereales/arroz, restos de leña fina, ceniza y carbón vegetal. Estos materiales absorberán convenientemente la gallinaza y mineralizarán el abono. A los materiales anteriores se les puede añadir cal de construcción (composición más de 80% de óxido de calcio) para evitar humedades y tierra de diatomeas para desparasitación de la caseta/ponederos. La roca basáltica micronizada también es muy interesante por sus aportes minerales (os la recomiendo encarecidamente para los suelos de ph alto). De esta manera aportamos otros minerales a las camas para mejorar así el abono final.

 

Lo interesante es cambiarlo cada 30 días (o cuando veamos que la cama ha bajado y comience a estar apelmazada) y dejar el abono saliente cubierto con plástico (solo en invierno) o paja a la intemperie en sombra hasta que se mineralice y se estabilice la mezcla. El abono estará listo para aplicar al cultivo cuando no desprenda prácticamente olor alguno y tenga una textura similar a un compost.

 

Al cubrir el suelo del gallinero con paja permitimos que comience el proceso de compostaje de la gallinaza

 

2.      Patio del gallinero.

El suelo del patio del gallinero es preferible que sea de tierra. La idea es hacer una cama igual que en la caseta del gallinero aunque con un grosor mayor, entre 30 y 40cms. Los materiales más interesantes son restos de leña (gorda y fina), paja, hierba verde y seca, serrín y virutas de leña (familia Quercus), ceniza y carbón vegetal. Lo ideal es crear una cobertura de suelo que cree un microclima para que microorganismos y todo tipo de organismos menores puedan habitarlo y generar así alimento para las gallinas y fertilidad en el suelo.

 

Siega de hierba y pequeñas ramas preparadas para cubrir todo el patio del gallinero

Hierba y ramas ya repartidas por el patio del gallinero dos semanas después

 

Las gallinas, de manera natural, excavan toda la zona de cobertura y la tierra en busca de organismos menores que las alimenten. De esta manera voltean y mezclan todo el material realizando el trabajo de volteo necesario en los procesos de compostaje. No es perfecto pero el costo energético es nulo más allá de las pocas horas de trabajo que requiere. Cuando la cama ha bajado de altura y se ha ido descomponiendo se vuelve a realizar la misma tarea creando una nueva cama y un nuevo microclima. Una vez al año se puede recoger la parte superficial, el abono orgánico, para aplicar directamente a las zonas de cultivo.

 

3.      Composteras en patio del gallinero.

 En las composteras habitualmente hay que voltear el compost. Si permitimos que las gallinas accedan a las composteras mediante algún tipo de ventana de acceso al interior de éstas, las gallinas se encargarán de excavar y fertilizar las composteras pudiendo alimentarse a la vez que abonan y trabajan nuestro compost. Por eso es buena idea poner las composteras dentro del patio del gallinero o permitir que las gallinas accedan a las composteras exteriores.

4    Composteras en tierra.

 Realizando agujeros en la tierra con una pala y rellenando éstos con materia orgánica de todo tipo, conseguiremos una cantidad importante de lombrices y otros organismos menores tras unos meses. Tras rellenar el agujero con MO taparemos con tierra. Tiempo después, cuando volvamos a abrir el agujero, las gallinas se darán un festín con todos los organismos menores que allí encontrarán. Este sistema permite recoger la MO enterrada y dejarla a secar pues ha tenido mayormente un proceso de putrefacción bajo tierra, por esta razón hay que dejarla al sol para extraerle la humedad sobrante. Este método sirve para alimentar gallinas con proteína de los organismos menores que comen más que para generar un buen abono.

 La medida de los agujeros a cavar será la misma que el volumen de materia orgánica del que dispongamos en cada momento. Restos de verdura y de fruta son ideales para este tipo de elaboración.

 

 TIERRA DE DIATOMEAS, CENIZA Y HARINA DE BASALTO

 La tierra de diatomeas es fundamentalmente un insecticida y se usa para desparasitación tanto en gallineros como en las huertas. Sus elevados índices de Si ayudan a reforzar las paredes vegetales de las hojas y la estructura en general de las plantas.

 La ceniza de leña (Quercus) es otro aporte interesante como secante de humedades y mineralización de la gallinaza. Aporta fundamentalmente carbonato cálcico y potasio. En ph ácido es muy interesante, en ph básico en principio no sería necesario. Poner en el gallinero un cajón con ceniza puede ser muy interesante porque las gallinas se bañan en ceniza para desparasitarse y limpiarse.

 La harina de basalto es mi favorita porque ayuda a la construcción de complejos arcillo-húmicos. Gracias a su capacidad para generar intercambios iónicos permite a las plantas absorber más cantidad y variedad de nutrientes. Su composición es variadísima: silicio, hierro, calcio, magnesio, manganeso, cobre, zinc, fósforo.

 Para suelos ph alto es un aporte mineral que compensa la inversión a realizar pues hierro, manganeso, cobre, zinc y fósforo (en algunos casos) son minerales no disponibles en ph alto y son minerales fundamentales en la reproducción, crecimiento, estructura y salud preventiva de las plantas. Hierro y magnesio asimismo son fundamentales en los procesos de fotosíntesis.

 Podéis espolvorearla en las camas y en los patios de los gallineros encima de la MO que uséis. De esta manera estaréis creando un abono orgánico completísimo para vuestros bancales. Solo espolvorearlos, usad la cantidad justa. Las gallinas se alimentarán de ellas en parte y siempre se os quedará una parte de la harina mineral en la tierra del patio del gallinero. Por lo tanto, es más efectivo aplicarla directamente a las tierras de cultivo. Las dósis que se emplean para abonar bancales varían entre 100-150gr por m2. A mí me parece mucho la verdad. Entre 50-100gr sería suficiente si lo aplicáis directamente al bancal.

 En el patio del gallinero se suele recoger el abono, la parte más superficial de la tierra (de color más oscuro), una vez al año. Por lo tanto, en otoño recogeréis el abono del patio del gallinero para trasladarlo a vuestros bancales de verano. Aplicad el abono que hayáis sacado del patio y las camas del gallinero a los bancales y luego aplicad encima la harina de basalto.

 Con este manejo y buenos aportes de MO conseguiréis un cambio significativo en la fertilidad de vuestros bancales y cultivos más saludables y productivos.